CALIDAD DE VIDA, SINTOMAS PSICOLÓGICOS, APOYO SOCIAL, PERSONALIDAD Y AFRONTAMIENTO TRAS EL TRASPLANTE

En este artículo, resumiré brevemente la tesis sobre “Calidad de vida y trasplante”

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que presenté en la Facultad de Psicología el 12 de enero del año 2016, ante el tribunal. Anteriormente, en el 2008 presenté mi trabajo de investigación sobre calidad de vida (CVRS) en enfermos con hepatitis C. Un porcentaje de ellos llegaban a tener que recibir un trasplante de hígado, por lo que me pareció interesante conocer el bienestar y otra serie de aspectos psicológicos de las personas que han recibido el injerto de un nuevo hígado, añadiendo dos grupos de comparación: aquellos que han recibido implantes de riñón y pulmón.

 

En el estudio resalté lo siguiente: en el ámbito médico español podemos estar orgullosos de los grandes logros alcanzados en relación a los trasplantes, puesto que somos el país que lidera el porcentaje de donantes por millón de habitantes. Además, no solamente cuenta el factor concienciación de la sociedad sino los adelantos en cirugía, anestesia y de tratamiento inmunosupresor que han ido desarrollándose a lo largo de la breve historia de los trasplantes en el mundo y España y el importante papel desempeñado por la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) y sus coordinadores en nuestro país. Sin todos estos factores, los trasplantes serían un imposible.

 

El objetivo de la presente investigación se dirige a describir las muestras de trasplantados, es decir, personas trasplantadas de hígado, riñón y pulmón para conocer sus características sociodemográficas (edad, sexo, estado civil, nivel de estudios, situación laboral…), su personalidad (niveles de extraversión y neuroticismo), los síntomas psicológicos predominantes (evaluamos niveles de somatización, obsesión- compulsión, sensibilidad interpersonal, depresión, ansiedad, hostilidad, ansiedad fóbica, ideación paranoide, psicoticismo), grado de apoyo social, afrontamiento (activo o pasivo), así como su calidad de vida relacionada con la salud. Las hipótesis planteadas pretenden dar cuenta de las relaciones establecidas entre las variables evaluadas por los cuestionarios utilizados.

 

Los instrumentos de evaluación utilizados comunes a las tres muestras son el EPQ (personalidad), MOS (apoyo social), SCL-90 (síntomas psicológicos), el cuestionario genérico de calidad de vida SF-36 y los específicos para los trasplantados de hígado (SF-LDQOL), riñón (ESRD-CL), y pulmón (SGRQ).

 

La muestra de trasplantados de hígado estaba formada por 82 sujetos, la de riñón por 35 sujetos y la de pulmón por 22 sujetos. Se realizaron análisis estadísticos (correlaciones, regresiones, análisis de varianza) aplicados a los datos conseguidos.

 

Las conclusiones de la investigación básicamente se resumirían en lo siguiente:

 

  1. Las muestras de trasplantados alcanzan puntuaciones altas en Extraversión, Afrontamiento Activo y perciben un Apoyo Social alto. Se caracterizan por tener mayor bienestar en Rol Emocional y Salud Mental y menores puntuaciones en Salud Física y Vitalidad. La Depresión Melancólica y la Obsesión-Compulsión son los síntomas más comunes.

 

  1. Las diferencias más significativas entre grupos son entre los trasplantados de hígado y riñón donde el primer grupo muestra más Apoyo Social y Salud Física y los trasplantados de pulmón muestran más Vitalidad que los trasplantados de riñón.

 

  1. El Neuroticismo o personalidad inestable se relaciona con más síntomas psicológicos y con peor calidad de vida relacionada con la salud. El afrontamiento pasivo también tiene un papel importante pero más secundario.

 

  1. El Neuroticismo es el predictor más importante de la calidad de vida y de los síntomas psicológicos. Los síntomas psicológicos son mejor predichos que la CVRS.

 

  1. Respecto a las diferencias de género, los hombres muestran mayor CVRS que las mujeres en la muestra de trasplantados de hígado, observándose algunas diferencias significativas.

 

  1. Entre los trasplantados de hígado, aquellos con complicaciones después de la cirugía, muestran más personalidad con tendencia al neuroticismo, peor salud general y mental, más ansiedad, más preocupación por el futuro y la salud y más efectos de la enfermedad en la vida diaria.

 

  1. En definitiva, la CVRS es aceptable en las muestras de trasplantados y los niveles de síntomas psicológicos no son excesivamente elevados, por lo que concluimos que el trasplante es un método médico de elección en los casos en los que peligra la vida del paciente y que su calidad de vida se ve comprometida.

 

  1. Los psicólogos tenemos un papel determinante en la calidad de vida del paciente trasplantado y en su familia realizando programas de prevención de trastornos asociados tales como ansiedad y depresión así como apoyo en casos de baja adherencia al tratamiento médico y la promoción de hábitos saludables.

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