ATENCIÓN PSICOLÓGICA EN ADULTOS EN PSICOSALUD EMOCIONAL

1. ANSIEDAD

2. TRASTORNO DE ANSIEDAD GENERALIZADA

3. TRASTORNO DE PÁNICO

4. AGORAFOBIA

5. ANSIEDAD O FOBIA SOCIAL

6. FOBIAS ESPECÍFICAS

7. TRASTORNOS DE SÍNTOMAS SOMÁTICOS

  • 7.1. TRASTORNO DE ANSIEDAD POR ENFERMEDAD
  • 7.2. TRASTORNO DE SÍNTOMAS SOMÁTICOS

8, TRASTORNO OBSESIVO COMPULSIVO

9. TRASTORNO BIPOLAR I

  • Episodio maniaco
  • Episodio hipomaniaco

10. TRASTORNO BIPOLAR II

11.EPISODIO DEPRESIVO MAYOR

12.DISTIMIA

13.TRASTORNO ADAPTATIVOS

14.TRASTORNO POR ESTRÉS POSTRAUMÁTICO

15. TRASTORNOS DE PERSONALIDAD

16.OTROS PROBLEMAS DE ATENCIÓN CLINICA

17. ORIENTACIÓN A PERSONAS CON ENFERMEDADES CRÓNICAS

 

 

 

1. ANSIEDAD:

La ansiedad es una emoción similar al miedo que requiere aprendizaje. En sí misma la ansiedad no es negativa sino que es adaptativa y nos facilita a rendir y actuar adecuadamente según las circunstancias. Sin embargo, cuando la ansiedad aumenta desmesuradamente y sus manifestaciones fisiológicas, pensamientos y conductas no se pueden controlar es cuando surge el problema.

Las características para un diagnóstico serian las siguientes:

  • La reacción es excesiva o desproporcionada.
  • No se puede controlar a pesar de los repetidos intentos por lograrlo.
  • La persona reconoce que su miedo es irracional
  • La conducta del sujeto no es adaptativa, perturbando el funcionamiento normal y cotidiano de la persona.
  • El contexto o circunstancias sociales y en las que tiene lugar el problema, determinan en gran medida la importancia o significación del mismo.
  • La duración o persistencia del miedo es importante, las fobias tienden a persistir y prolongarse en el tiempo, aunque suelen fluctuar en intensidad.

En Psicosalud Emocional utilizo terapia cognitiva conductual para poder afrontar aquellas situaciones que te producen ansiedad, miedo, preocupación trabajando a través de la psicoeducación conociendo como funciona la ansiedad, sabiendo cuales son tus pensamientos y conductas que limitan tu funcionamiento diario.

El proceso supondría siguiendo la terapia cognitivo-conductual, la modificación de creencias irracionales y el afrontamiento progresivo de situaciones generadoras de miedo en función de cada caso. Dotar de más seguridad y confianza a través de herramientas para afrontar con éxito las situaciones generadoras de miedo o ansiedad intensas y plantearse objetivos en la vida. En ciertos casos utilizo la terapia de aceptación y compromiso.

Los siguientes trastornos de ansiedad se pueden presentar en la población adulta y han sido o son motivo de consulta en Psicosalud Emocional: Trastorno de ansiedad generalizada, trastorno de pánico con o sin agorafobia, ansiedad o fobia social, ansiedad inducida por sustancias o afección médica. El trastorno obsesivo compulsivo y la ansiedad por la enfermedad (anteriormente conocida como hipocontria) siguen considerándose por algunos profesionales de la salud mental como trastornos de ansiedad aunque en el DSM-V aparezcan en apartados separados. Todos estos trastornos no se pueden atribuir a los efectos fisiológicos de una enfermedad física, a los efectos fisiológicos de una sustancia o a otros problema psicológico.

2. TRASTORNO DE ANSIEDAD GENERALIZADA

El trastorno de ansiedad generalizada se caracteriza por los siguiente síntomas:

-Ansiedad y preocupación excesiva (anticipación aprensiva), que se produce durante más días de los que ha estado ausente durante un mínimo de seis meses, en relación con diversos sucesos o actividades (como en la actividad laboral o escolar).

-A la persona le es difícil controlar la preocupación.

-La ansiedad y la preocupación se asocian a tres (o más) de los seis síntomas siguientes:

Inquietud o sensación de estar atrapado o con los nervios de punta, fácilmente fatigado, dificultad para concentrarse o quedarse con la mente en blanco, irritabilidad, tensión muscular, problemas de sueño (dificultad para dormirse o para continuar durmiendo, o sueño inquieto e insatisfactorio).

Para el tratamiento de la ansiedad generalizada, se utiliza una metodología psicoeducativa en un principio para clarificar el papel de la ansiedad, conocer los tipos de preocupaciones, las funciones de estas preocupaciones, enseñar técnicas de gestión de ansiedad y cambiar los pensamientos y creencias .

3. TRASTORNO DE PÁNICO

Es un problema psicológico frecuente en consulta y que se caracteriza por los siguientes síntomas:

-Ataques de pánico imprevistos recurrentes. Un ataque de pánicoes la aparición súbita de miedo intenso o de malestar intenso que alcanza su máxima expresión en minutos y durante este tiempo se producen cuatro (o más) de los síntomas siguientes:

Palpitaciones, golpeteo del corazón o aceleración de la frecuencia cardíaca, sudoración, temblor o sacudidas, sensación de dificultad para respirar o de asfixia, sensación de ahogo, dolor o molestias en el tórax, náuseas o malestar abdominal, sensación de mareo, inestabilidad, aturdimiento o desmayo, escalofríos o sensación de calor, parestesias (sensación de entumecimiento o de hormigueo), desrealización (sensación de irrealidad) o despersonalización (separarse de uno mismo), miedo a perder el control o de “volverse loco.”,miedo a morir.

-Al menos a uno de los ataques le ha seguido un mes (o más) de uno o los dos hechos siguientes:

1. Inquietud o preocupación continua acerca de otros ataques de pánico o de sus consecuencias (p. ej., pérdida de control, tener un ataque de corazón, “volverse loco”).

2. Un cambio significativo de mala adaptación en el comportamiento relacionado con los ataques (p. ej., comportamientos destinados a evitar los ataques de pánico, como evitación del ejercicio o de las situaciones no familiares).

La aparición súbita se puede producir desde un estado de calma o desde un estado de ansiedad.

4. AGORAFOBIA

El trastorno de pánico puede o no ir unido a la Agorafobia que se caracteriza por los siguientes síntomas:

Miedo o ansiedad intensa acerca de dos (o más) de las cinco situaciones siguientes:

1. Uso del transporte público (p. ej., automóviles, autobuses, trenes, barcos, aviones).

2. Estar en espacios abiertos (p. ej., zonas de estacionamiento, mercados, puentes).

3. Estar en sitios cerrados (p. ej., tiendas, teatros, cines).

4. Hacer cola o estar en medio de una multitud.

5. Estar fuera de casa solo.

La persona teme o evita estas situaciones debido a la idea de que escapar podría ser difícil o podría no disponer de ayuda si aparecen síntomas tipo pánico u otros síntomas incapacitantes o embarazosos (p. ej., miedo a caerse en las personas de edad avanzada; miedo a la incontinencia).

Las situaciones agorafóbicas casi siempre provocan miedo o ansiedad. Estas situaciones se evitan activamente, requieren la presencia de un acompañante o se resisten con miedo o ansiedad intensa. Este miedo o la ansiedad es desproporcionado al peligro real que plantean las situaciones agorafóbicas y al contexto sociocultural y el miedo, ansiedad o evitación son continuas y dura típicamente seis o más meses.

El tratamiento psicológico consistiría en conocer junto con el paciente los síntomas que tiene y saber como la evitación está jugando un papel clave en el mantenimiento del problema. Trabajar situaciones temidas a través de exposiciones progresivas para recuperar poco a poco una vida más normalizada, cambiar los pensamientos invalidantes, así como hacer hincapié en aquellas fortalezas y habilidades que tiene la persona y que no son consciente de ellas fortaleciendo su autoestima.

5. ANSIEDAD O FOBIA SOCIAL

Se caracteriza por lo siguiente:

Miedo o ansiedad intensa en una o más situaciones sociales en las que el individuo está expuesto al posible examen por parte de otras personas. Algunos ejemplos son las interacciones sociales (p. ej., mantener una conversación, reunirse con personas extrañas), ser observado (p. ej., comiendo o bebiendo) y actuar delante de otras personas (p. ej., dar una charla).

La persona tiene miedo de actuar de cierta manera o de mostrar síntomas de ansiedad que se valoren negativamente (es decir, que lo humillen o avergüencen; que se traduzca en rechazo o que ofenda a otras personas).

Las situaciones sociales casi siempre provocan miedo o ansiedad y se evitan o resisten con miedo o ansiedad intensa durando típicamente seis meses o más. Este miedo o la ansiedad son desproporcionados a la amenaza real planteada por la situación social y al contexto sociocultural, causando malestar clínicamente significativo o deterioro en lo social, laboral u otras áreas importantes del funcionamiento.

El tratamiento psicológico iría dirigido a conocer el funcionamiento de la ansiedad social, como se desarrolló su problema, para posteriormente trabajar las situaciones temidas con experimentos conductuales y cambiando los pensamientos y creencias que mantienen el alto temor y evitación social. En ocasiones es necesario un entrenamiento en habilidades sociales así como fomentar la autoestima del cliente. Puede haber comorbilidad con otros trastornos como la depresión por lo que seria necesario un tratamiento farmacológico.

6. FOBIAS ESPECÍFICAS

En este diagnóstico se incluiría una amplia variedad de fobias a diversos objetos o situaciones. A continuación se describen sus principales características:

Miedo o ansiedad intensa por un objeto o situación específica (p.ej., volar, alturas, animales, administración de una inyección, ver sangre). El objeto o la situación fóbica casi siempre provoca miedo o ansiedad inmediata, evitando o resistiéndose activamente con miedo o ansiedad intensa.

El miedo o la ansiedad es desproporcionado al peligro real que plantea el objeto o situación específica y al contexto sociocultural. Este miedo, ansiedad o evitación es persistente, y dura típicamente seis o más meses causando malestar clínicamente significativo o deterioro en lo social, laboral u otras áreas importantes del funcionamiento. La alteración no se explica mejor por los síntomas de otro problema psicológico.

El estímulo fóbico puede ser: Animal (p. ej., arañas, insectos, perros), entorno natural (p. ej., alturas, tormentas, agua), sangre-inyección-herida (p. ej., agujas, procedimientos médicos invasivos), situacional (avión, ascensor, sitios cerrados, Otra (p. ej., situaciones que pueden derivar en ahogo o vómitos; en niños, p. ej., sonidos ruidosos o personajes disfrazados).

El tratamiento psicológico iría dirigido a la psicoeducación para conocer el funcionamiento de la ansiedad y como se desarrollan las fobias, en concreto, la fobia que ha desarrollado el cliente que viene a consulta. Posteriormente el tratamiento continuaría con una Exposición progresiva al objeto o situación que produce ansiedad.

7. TRASTORNOS DE SÍNTOMAS SOMÁTICOS

Dentro del apartado de Trastornos de síntomas somáticos y trastornos relacionados se encuentra latrastorno de ansiedad por la enfermedad y el trastorno de síntomas somáticos. El concepto clásico de hipocondría estaría asumido por estas dos nuevas etiquetas diagnósticas.

A continuación detallo los criterios para el diagnostico del trastorno de ansiedad por la enfermedad:

-Preocupación por padecer o contraer una enfermedad grave.

-No existen síntomas somáticos o, si están presentes, son únicamente leves. Si existe otra afección médica o un riesgo elevado de presentar una afección médica (p. ej., antecedentes familiares importantes), la preocupación es claramente excesiva o desproporcionada.

-Existe un grado elevado de ansiedad acerca de la salud, y el individuo se alarma con facilidad por su estado de salud.

-El individuo tiene comportamientos excesivos relacionados con la salud (p. ej., comprueba repetidamente en su cuerpo si existen signos de enfermedad) o presenta evitación por mala adaptación (p. ej., evita las visitas al clínico y al hospital).

-La preocupación por la enfermedad ha estado presente al menos durante seis meses, pero la enfermedad temida específica puede variar en ese período de tiempo.

-La preocupación relacionada con la enfermedad no se explica mejor por otro trastorno mental.

El Trastorno de síntomas somáticos propiamente dicho, se caracteriza por los siguientes síntomas:

-Uno o más síntomas somáticos que causan malestar o dan lugar a problemas significativos en la vida diaria.

-Pensamientos, sentimientos o comportamientos excesivos relacionados con los síntomas somáticos o asociados a la preocupación por la salud como se pone de manifiesto por una o más

de las características siguientes:

1. Pensamientos desproporcionados y persistentes sobre la gravedad de los propios síntomas.

2. Grado persistentemente elevado de ansiedad acerca de la salud o los síntomas.

3. Tiempo y energía excesivos consagrados a estos síntomas o a la preocupación por la salud.

-Aunque algún síntoma somático puede no estar continuamente presente, el trastorno sintomático es persistente (por lo general más de seis meses).

Tratamiento psicológico: De forma semejante a un trastorno de ansiedad como los detallados anteriormente, la persona sufre de una alta activación, un aumento de la focalización de la atención en aquello que le preocupa y conductas que disminuyen esta alta activación pero que mantienen el problema y creencias y malinterpretaciones de síntomas. Estos serían los aspectos a tratar principalmente en este tipo de problemas, así como:

  • Identificar tus temores y pensamientos sobre enfermedades graves
  • Aprender formas alternativas de interpretar las sensaciones corporales cambiando los pensamientos que no ayudan
  • Estar más consciente de cómo las preocupaciones te afectan a ti y a tu comportamiento
  • Cambiar la manera en que respondes a las sensaciones y los síntomas corporales
  • Aprender habilidades para lidiar con la ansiedad y el estrés, y tolerarlos
  • Reducir tu ausencia en situaciones o actividades a causa de las sensaciones físicas

8. TRASTORNO OBSESIVO COMPULSIVO

El Trastorno obsesivo compulsivo o también conocido por las siglas TOC se caracteriza por las siguientes características:

Presencia de obsesiones, compulsiones o ambas:

Las obsesiones se definen por:

1. Pensamientos, impulsos o imágenes recurrentes y persistentes que se experimentan, en algún momento durante el trastorno, como intrusas o no deseadas, y que en la mayoría de los sujetos causan ansiedad o malestar importante.

2. La persona intenta ignorar o suprimir estos pensamientos, impulsos o imágenes, o neutralizarlos con algún otro pensamiento o acto (es decir, realizando una compulsión).

Las compulsiones se definen por:

1. Comportamientos (p. ej., lavarse las manos, ordenar, comprobar las cosas) o actos mentales (p. ej., rezar, contar, repetir palabras en silencio) repetitivos que el sujeto realiza como respuesta a una obsesión o de acuerdo con reglas que ha de aplicar de manera rígida.

2.El objetivo de los comportamientos o actos mentales es prevenir o disminuir la ansiedad o el malestar, o evitar algún suceso o situación temida; sin embargo, estos comportamientos o actos mentales no están conectados de una manera realista con los destinados a neutralizar o prevenir, o

bien resultan claramente excesivos

Las obsesiones o compulsiones requieren mucho tiempo (p. ej., ocupan más de una hora diaria) o causan malestar clínicamente significativo o deterioro en lo social, laboral u otras áreas importantes

del funcionamiento.

Como trastorno de ansiedad que es, el tratamiento cognitivo conductual consiste en la exposición a lo que se teme (pensamiento o realidad) con la prohibición de realizar conductas de evitación, en este caso rituales neutralizadores, de forma que el paciente se arriesgue a sentir la ansiedad. La aceptación de la ansiedad que se siente es un proceso que ayuda en el tratamiento por lo que la terapia de aceptación y compromiso puede ayudar a que la persona se involucre más al tratamiento en lugar de luchar frente a los temores y eliminar la ansiedad, conseguir que ésta no interfiera en su vida, en los objetivos, valores e intereses que se plantea importantes.

9. TRASTORNO BIPOLAR I

Para un diagnóstico de trastorno bipolar I, es necesario que se cumplan los criterios siguientes para un episodio maníaco. Antes o después del episodio maníaco pueden haber existido episodios hipomaníacos o episodios de depresión mayor:

Episodio maníaco.

– Un período bien definido de estado de ánimo anormalmente y persistentemente elevado, expansivo o irritable, y un aumento anormal y persistente de la actividad o la energía dirigida a un

objetivo, que dura como mínimo una semana y está presente la mayor parte del día, casi todos los días (o cualquier duración si se necesita hospitalización).

-Durante el período de alteración del estado de ánimo y aumento de la energía o actividad, existen tres (o más) de los síntomas siguientes (cuatro si el estado de ánimo es sólo irritable) en un grado significativo y representan un cambio notorio del comportamiento habitual:

1. Aumento de la autoestima o sentimiento de grandeza.

2. Disminución de la necesidad de dormir (p. ej., se siente descansado después de sólo tres horas de sueño).

3. Más hablador de lo habitual o presión para mantener la conversación.

4. Fuga de ideas o experiencia subjetiva de que los pensamientos van a gran velocidad.

5. Facilidad de distracción (es decir, la atención cambia demasiado fácilmente a estímulos externos poco importantes o irrelevantes), según se informa o se observa.

6. Aumento de la actividad dirigida a un objetivo (social, en el trabajo o la escuela, o sexual) o agitación psicomotora (es decir, actividad sin ningún propósito no dirigida a un objetivo).

7. Participación excesiva en actividades que tienen muchas posibilidades de consecuencias dolorosas (p. ej., dedicarse de forma desenfrenada a compras, juergas, indiscreciones sexuales o inversiones de dinero imprudentes).

-La alteración del estado del ánimo es suficientemente grave para causar un deterioro importante en el funcionamiento social o laboral, para necesitar hospitalización con el fin de evitar el daño a sí mismo o a otros, o porque existen características psicóticas.

– El episodio no se puede atribuir a los efectos fisiológicos de una sustancia (p. ej., una droga, un medicamento, otro tratamiento) o a otra afección médica.

Episodio hipomaníaco.

Un período bien definido de estado de ánimo anormalmente y persistentemente elevado, expansivo o irritable, y un aumento anormal y persistente de la actividad o la energía, que dura como mínimo cuatro días consecutivos y está presente la mayor parte del día, casi todos los días. Se habría de cumplir también el criterio B como en el episodio maníaco.

10. TRASTORNO BIPOLAR II

Para un diagnóstico de trastorno bipolar II, es necesario que se cumplan los criterios para un episodio hipomaníaco actual o pasado y los criterios para un episodio de depresión mayor actual o pasado.

El trastorno depresivo mayor para que sea diagnosticado ha de cumplir con la serie de síntomas que ha aparecido anteriormente en la descripción del episodio depresivo mayor.

Tratamiento psicológico

Según Becoña y Lorenzo (2001) en la última década los tratamientos psicológicos o las intervenciones psicosociales para el trastorno bipolar se han ido abriendo paso poco a poco y hoy se consideran imprescindibles para mejorar en varios importantes aspectos la vida de un paciente con trastorno bipolar. Las distintas intervenciones se han orientado básicamente a incrementar la adherencia al régimen de medicación, disminuir las hospitalizaciones y las recaídas y mejorar la calidad de vida de los pacientes. Los componentes necesarios para un buen tratamiento psicológico serían los de psicoeducación, mejorar la adherencia a la medicación, terapia individual cognitiva-conductual o interpersonal y terapia marital o familiar. Resolución de problemas, afrontamiento de situaciones estresantes, cambio en la percepción de las situaciones, ofrecer herramientas para aumentar la autoestima y autoconfianza tras episodios de manía o depresión, enseñar habilidades sociales.

El trastorno bipolar es crónico y según investigaciones recientes, la combinación entre tratamiento farmacológico y psicológico es lo que da mejores resultados.

11.EPISODIO DEPRESIVO MAYOR

Cinco (o más) de los síntomas siguientes han estado presentes durante el mismo período de dos semanas y representan un cambio del funcionamiento anterior; al menos uno de los síntomas es (1) estado de ánimo deprimido o (2) pérdida de interés o de placer.

1. Estado de ánimo deprimido la mayor parte del día, casi todos los días, según se desprende de la información subjetiva (p. ej., se siente triste, vacío o sin esperanza) o de la observación por parte de otras personas (p. ej., se le ve lloroso).

2. Disminución importante del interés o el placer por todas o casi todas las actividades la mayor parte del día, casi todos los días (como se desprende de la información subjetiva o de la observación).

3. Pérdida importante de peso sin hacer dieta o aumento de peso (p. ej., modificación de más del 5% del peso corporal en un mes) o disminución o aumento del apetito casi todos los días. (Nota: En los niños, considerar el fracaso en el aumento del peso esperado.)

4. Insomnio o hipersomnia casi todos los días.

5. Agitación o retraso psicomotor casi todos los días (observable por parte de otros; no simplemente la sensación subjetiva de inquietud o enlentecimiento).

6. Fatiga o pérdida de la energía casi todos los días.

7. Sentimientos de inutilidad o de culpabilidad excesiva o inapropiada (que puede ser delirante) casi todos los días (no simplemente el autorreproche o culpa por estar enfermo).

8. Disminución de la capacidad para pensar o concentrarse, o de tomar decisiones, casi todos los días (a partir del relato subjetivo o de la observación por parte de otras personas).

9. Pensamientos de muerte recurrentes (no sólo miedo a morir), ideas suicidas recurrentes sin un plan determinado, intento de suicidio o un plan específico para llevarlo a cabo.

B. Los síntomas causan malestar clínicamente significativo o deterioro en lo social, laboral u otras áreas importantes del funcionamiento.

C. El episodio no se puede atribuir a los efectos fisiológicos de una sustancia o de otra afección médica.

12.DISTIMIA

-Estado de ánimo deprimido durante la mayor parte del día, presente más días que los que está ausente, según se desprende de la información subjetiva o de la observación por parte de otras personas, durante un mínimo de dos años.

-Presencia, durante la depresión, de dos (o más) de los síntomas siguientes:

Poco apetito o sobrealimentación, insomnio o hipersomnia, poca energía o fatiga, baja autoestima, falta de concentración o dificultad para tomar decisiones, sentimientos de desesperanza.

El tratamiento psicológico indicado para episodios depresivos o trastorno por depresión en un ambiente de empatía y confidencialidad iria dirigido conseguir una mayor estabilidad emocional a través de estrategias que permitieran la modificación de creencias desadaptativas sobre la propia persona, el mundo, el futuro, estabilización de las funciones biológicas (sueño, alimentación), la planificación de actividades agradables entre otras estrategias y técnicas adaptadas a las necesidades del cliente.

Si tienes alguno de estos síntomas no dudes en ponerte en contacto conmigo. Cuanto antes seas consciente de ellos, estarás a tiempo de poder afrontarlos con más facilidad:

13.TRASTORNO ADAPTATIVOS

En ocasiones la persona atraviesa por alguna experiencia estresante tales comoduelo por perdida de seres queridos,, crisis vitales, afrontamiento de enfermedad crónica propia o de un familiar, mobbing laboral..con lo que no puede sobreponerse, o incluso vive por diferentes factores estresantes, con lo que le resulta difícil gestionar todo esto. Los Trastornos Adaptativos (TA) constituyen un importante problema de salud por las implicaciones personales, sociales y económicas que conllevan. Tienen una alta prevalencia y provocan un elevado coste económico (asociado a bajas y disminución del rendimiento laboral). Baños Ribera et al (2008)

A continuación se desarrollan los síntomas que aparecen en el DSM-5:

A. Desarrollo de síntomas emocionales o del comportamiento en respuesta a un factor o factores de estrés identificables que se producen en los tres meses siguientes al inicio del factor(es) de estrés.

B. Estos síntomas o comportamientos son clínicamente significativos, como se pone de manifiesto por una o las dos características siguientes:

1. Malestar intenso desproporcionado a la gravedad o intensidad del factor de estrés, teniendo en cuenta el contexto externo y los factores culturales que podrían influir en la gravedad y la presentación de los síntomas.

2. Deterioro significativos en lo social, laboral u otras áreas importantes del funcionamiento.

C. La alteración relacionada con el estrés no cumple los criterios para otro trastorno mental y no es simplemente una exacerbación de un trastorno mental preexistente.

D. Los síntomas no representan el duelo normal.

E. Una vez que el factor de estrés o sus consecuencias han terminado, los síntomas no se mantienen durante más de otros seis meses.

Puede cursar con estado de ánimo deprimido, con ansiedad, con alteración de la conducta o una combinación de todos los estados.

Tratamiento psicológico:

Vallejo (2015) pormenoriza distintos enfoques y técnicas cognitivo-conductuales usadas, como el entrenamiento en solución de problemas, entrenamiento en técnicas de relajación, intervenciones basadas en mindfulness; psicoterapia interpersonal, terapias grupales de apoyo, terapia familiar y técnicas de desensibilización.

Baños et al(2008) manifiesta que un porcentaje de personas, tras acontecimientos parece que “aprenden” y “crecen” de esta experiencia. Es decir, no sólo salen “ilesos”, sino fortalecidos. A la hora de estudiar este en algunas características psicológicas, como la “resiliencia” y la fortaleza .intervenciones específicas, cuyo objetivo sea promover el bienestar y las emociones positivas y fortalecer las cualidades positivas de las personas. Este tipo de intervenciones se consideran como complementarias a la terapia “tradicional”, basada en los problemas

Dotar de estrategias para afrontar los acontecimientos estresantes, solución de problemas, habilidades sociales, gestión del estrés y en función de la sintomatología del cliente (ansiedad, depresión somatización) utilizar las técnicas descritas anteriormente.

14.TRASTORNO POR ESTRÉS POSTRAUMÁTICO

El DSM-V (APA, 2013) lo define como:
Exposición a la muerte, lesión grave o violencia sexual, ya sea real o amenaza. Van acompañados de la presencia de síntomas de intrusión siguientes asociados al suceso traumático, que comienza después del suceso traumático tales como recuerdos, sueños angustiosos, reacciones disociativas, malestar psicológico, reacciones fisiológicas intensas…Existe una evitación persistente de estímulos asociados al suceso traumático, que comienza tras el suceso traumático, además de alteraciones negativas cognitivas, del estado de ánimo, de la alerta y la reactividad asociadas al suceso traumático, que comienzan o empeoran después del suceso traumático, la duración de la alteración es superior a un mes, causa malestar clínicamente significativo y el malestar no es debida a los efectos fisiológicos de una sustancia (p. ej., medicamento o a alguna enfermedad..

El tratamiento psicológico iría dirigido a conocer como se desarrollo el trauma, su historia, los síntomas específicos de la persona que viene a consulta, psicoeducación sobre el papel de la ansiedad, cambio de los pensamientos y de la reexperimentación de los mismos, entrenamiento en habilidades para gestionar emociones como la rabia y la ansiedad y exposiciones progresivas a las situaciones temidas.

15. TRASTORNOS DE PERSONALIDAD

Los trastornos de personalidad son un conjunto de rasgos de personalidad que suponen un patrón de pensamientos, emociones y conductas marcadas y poco saludables. Una persona con trastorno de personalidad tiene problemas para percibir y relacionarse con las situaciones y las personas. Esto causa problemas y limitaciones importantes en las relaciones, las actividades sociales, el trabajo y la escuela.

En algunos casos, es posible que no te des cuenta de que tienes un trastorno de personalidad porque tu manera de pensar y comportarte te parece natural. Y es posible que culpen a los demás por los problemas que tienen. Los trastornos de personalidad generalmente comienzan en la adolescencia o la adultez temprana.

Los tipos de trastornos de la personalidad se dividen en tres grupos, sobre la base de características y síntomas similares:

Los trastornos de la personalidad pertenecientes al grupo A se caracterizan por pensamientos o comportamientos excéntricos o extraños. Incluyen el trastorno paranoide de la personalidad, trastorno esquizoide de la personalidad y trastorno esquizotípico de la personalidad.

Los trastornos de la personalidad pertenecientes al grupo B se caracterizan por pensamientos o comportamientos dramáticos, excesivamente emotivos o impredecibles. Incluyen el trastorno de personalidad antisocial, trastorno límite de la personalidad, el trastorno histriónico de la personalidad y trastorno narcisista de la personalidad.

Los trastornos de la personalidad pertenecientes al grupo C se caracterizan por pensamientos o comportamientos de ansiedad o temor. Incluyen el trastorno de la personalidad por evitación, el trastorno de la personalidad dependiente y el trastorno de la personalidad obsesivo-compulsiva.

Este último grupo suele ser más frecuente en la consulta de Psicosalud Emocional y algunos del grupo B.

Los trastornos de la personalidad pueden alterar significativamente tanto la vida de la persona afectada como la de las personas que se preocupan por esta. Los trastornos de la personalidad pueden provocar problemas con las relaciones, el trabajo o la escuela, y pueden derivar en el aislamiento social o el consumo abusivo de drogas o alcohol.

Para la psicoterapia de estos trastornos son necesarias técnicas emotivas o experienciales, interpersonales, conductuales y cognitivas. Requiere de una relación intensa terapeuta paciente, un tratamiento más largo y estructurado que en los trastornos mentales (al menos durante un año) y no limitado a los síntomas observados, establecer tareas y objetivos delimitados, entrenamiento en habilidades interpersonales (regulación de expresión de emociones, asertividad, control de la ira ) solución de problemas y fomento de conductas de autonomía.

16.OTROS PROBLEMAS DE ATENCIÓN CLINICA

Como son problemas de relación con padres, hermanos u otras figuras significativas, maltrato, abuso o negligencia en niños y en adultos, problemas educativos y laborales (entre compañeros, con un superior, insatisfacción laboral, horarios laborales estresantes, entorno laboral estresante u hostil), otros problemas relacionados con el entorno social (problemas de la fase de la vida: casarse, tener hijos, empezar una carrera profesional, adaptarse al nido vacío cuando los hijos se van, y jubilarse, exclusión o rechazo social…)

17. ORIENTACIÓN A PERSONAS CON ENFERMEDADES CRÓNICAS

Las emociones, el estrés, los acontecimientos estresantes causan un efecto a nivel fisiológico (sistema inmune, endocrino, sistema nervioso autónomo) que de forma prolongada afecta a la salud física y emocional. Los trastornos psicosomáticos ya no son considerados un grupo distinto de enfermedades, sino que serian las enfermedades en las que los factores psicológicos tienen un papel de peso en las enfermedades medicas. Se trata de alteraciones físicas que en su origen, exacerbación o mantenimiento, están los factores psicológicos. Por lo general se trata de desordenes de etiología múltiple,en los que el estrés, las emociones, el aprendizaje emocional, la conducta, etc. juegan algún papel mas o menos importante.

El padecimiento de estos trastornos físicos genera estrés. A su vez, un aumento en el nivel de estrés suele acarrear un empeoramiento del trastorno medico. Ejemplos de trastornos psicofisiológicos serian: Trastornos cardiovasculares, endocrinos, respiratorios, gastrointestinales, dermatológicos, dolor crónico, musculoesquéleticos o del sistema inmune.

En estos casos el psicólogo puede beneficiar al paciente en: La promoción de hábitos de vida saludable, la adherencia al tratamiento médico, ofrecer herramientas para favorecer las respuestas adaptativas ante las diferentes situaciones relacionadas con la enfermedad y a realizar asesoramiento o psicoterapia en los casos en los que aparece algún trastorno psicológico.

Algunos de los programas que puede desarrollar un psicólogo de la salud que atiende personas con enfermedades crónicas son las siguientes: Mejora del seguimiento de las prescripciones médicas, manejo de los síntomas, asesoramiento familiar, comunicación con los profesionales sanitarios, habilidades sociales, mejora en la percepción de uno/a mismo/a